Extranjeras en El Salvador

Conoce encantadoras historias de mujeres de otros países que han encontrado su segundo hogar en El Salvador.

NICARAGUA María E. Molina “Me impresiona la tecnología que tienen”

En julio del 2008 Emelda llegó a El Salvador a trabajar al Centro Internacional del Cáncer del Hospital de Diagnóstico y desde esa fecha ha contribuido con terapias de radiación en Radioterapia y Radiocirugías.

Procedente de Managua, y con dos hijos nicaragüenses, Emelda disfruta mucho su trabajo, pues le ha dado la oportunidad de conocer el lado humano de los pacientes con cáncer y de aplicar los conocimientos de la física a las terapias.

Graduada como Físico Médico, ha estudiado en la Universidad de Buenos Aires, Argentina, M.D. Anderson Cancer Center en Houston, Texas, y SW Oncology Center en Phoenix, Arizona. “Me gusta El Salvador porque es pequeño pero grande en el campo de la medicina, la tecnología con la que cuentan aquí no la tienen otros países más desarrollados”, comenta.

Disfruta conversar con la gente, intercambiar las culturas, gusta del ambiente salvadoreño tanto así que en el futuro cabe la posibilidad de nacionalizarse si se le presenta la oportunidad.

Extraña Nicaragua, su familia, y por su trabajo no lo visita frecuentemente, pero trata de ir una vez al año o cuando hace espacio en su apretada agenda.